ELECCIONES EUROPEAS. ALGUNA REFLEXIÓN

Vecino. Opinion.

ELECCIONES EUROPEAS. ALGUNA REFLEXIÓN

Cuando aún no se han apagado los ecos de las elecciones para el Parlamento Europeo, parece oportuno dedicar un tiempo, aun breve, a reflexionar sobre las mismas, poniendo el acento especialmente en Villafranca. Así, de entrada, llama la atención la escasa participación en estos comicios (casi un 50% de abstención). O bien no somos conscientes todavía de la cada vez mayor influencia de las decisiones europeas en nuestra propia legislación y su afección en nuestro día a día, o bien dicha abstención se debe al mensaje de “todos los políticos son iguales”. Si esto último es la razón, no se alcanza a comprender por qué quienes sí votan menosprecian y abandonan a las formaciones que son " menos iguales". Resulta paradójico. Por otra parte, observamos que, una y otra vez, el voto en comicios autonómicos, nacionales o (como es el caso) europeos difiere mucho del voto en las municipales. No obstante, se percibe una concentración de voto en los partidos mayoritarios en detrimento de aquellos más firmes en el desarrollo del autogobierno de Navarra (partidos nacionalistas, Podemos). Segunda contradicción. Y para exponer lo que sigue, permítase citar una frase atribuida a Napoleón Bonaparte, escuchada recientemente a la gran Rosa Mª Calaf Dice más o menos así: ”Lo importante no es que el pueblo sea libre, sino que crea que es libre, pues de este modo se relaja". Dicha idea bonapartiana no ha perdido lamentablemente un ápice de vigencia. ¿Cómo si no explicarse el cada vez mayor incremento de votos a partidos como Vox o la incalificable propuesta de “Se acabó la fiesta”, o la cada vez mayor aceptación de especímenes como Díaz Ayuso, Trump, Milei y demás ralea? No olvidemos que las libertades y avances sociales de los que nos enorgullecemos no nos vinieron dados " gratis et amore". Fueron conquistas sociales y están cada vez más en peligro. Pero en Villafranca 65 votos para Vox y 22 para el personajillo “Alvise” Pérez. Poco nos pasa.

Búho insomne