Un paso más, ¿adelante o hacia atrás?
Vecino impasible. Opinion.

En La Voz de la Ribera añade la alcaldesa que “se trata de otro paso más que muestra nuestro compromiso por el desarrollo del camino de peregrinos a Caravaca de la Cruz, y con más motivo ante la celebración del año jubilar en el 2024”.
Para alucinar. ¿El ayuntamiento comprometido para desarrollar objetivos de naturaleza religiosa? Porque ese compromiso -“y otros” que ya se han dado, al parecer-, guarda relación con “el desarrollo del camino de peregrinos a Caravaca de la Cruz”.
Todo lo que rodea a esa Cruz de Caravaca es acción cristiana y católica. Una institución pública no debe meterse en semejante berenjenal. No es asunto suyo. El emblema de la religión cristiana es la Cruz. Esta representa la muerte y resurrección de Jesucristo que, según la jerga católica, redimió la humanidad. Un hecho fundamental en la fe del creyente. ¿Esto es lo que apoya este Ayuntamiento? Y esto ¿no es cosa exclusiva de la Iglesia?
El Ayuntamiento está contraviniendo su naturaleza y su función públicas. No tiene por qué adquirir compromiso alguno de naturaleza religiosa como es el que hace referencia a esa Cruz de Caravaca. El Ayuntamiento está actuando como fi fuera una sucursal de la Iglesia católica. No lo es, ¿verdad?
Y no. No estamos en contra de que existan asociaciones que se comprometan con ese camino y todo lo que esté implique. Si lo hacen de modo particular como asociación, están en su derecho. Pero que ese lugar lo ocupe el Ayuntamiento es un despropósito anticonstitucional y un atentado contra la pluralidad religiosa -y no religiosa- de la ciudadanía.
El Ayuntamiento se está metiendo en un terreno impropio de su carácter. No es propio de una institución aconfesional. Para eso está la parroquia.
El Ayuntamiento en materia religiosa no representa a nadie. La alcaldesa tampoco. Y los ediles que anteponen una y otra vez sus creencias religiosas a los principios de la Constitución deberían dejar el cargo. No se creó para ellos.
Vecino impasible