¿PASÓ UNA DANA O UNA TRITURADORA DE MADERA?
Vecino. Informacion.

Ya pasó más de un mes, desde que la villa fue sacudida por la Dana dejando como muestra de su violencia desatada la inhabilitación de las piscinas, numerosos destrozos en tejados; varias cigüeñas muertas en las antenas del cuartel; vientos alocados destrozando a su paso todo tipo de inmuebles, pero, sobre todo, árboles derribados sin piedad alguna por un viento huracanado, acompañado de truenos y rayos tremebundos…
Empiezo por lo último. Los árboles hechos una miseria… Siendo piadosos con lo sucedido, entiendo que la brigada municipal se vio sorprendida y superada por el vendaval y tan abrumada y saturada por el trabajo que no supo siquiera a dónde acudir, ni por dónde empezar. Además, los pueblos de la Ribera están tan bien coordinados entre sí que, en estas circunstancias, se ven incapaces de comunicarse para echarse una mano cuando uno se ve que la propia casa se hunde o el Ayuntamiento se ve inútil para afrontar los desastres imprevistos.
He comprobado que, tras lo acontecido, hubo una zona que quedó abandonada a su suerte y que la Brigada tardó más de lo habitual en limpiar los despojos ocasionados. Y, la verdad, tampoco sé muy bien qué entiende la Brigada y su mente rectora, o sea, la alcaldesa, por Limpieza, máxime en estos momentos en que la Península, o media, está ardiendo… Lo señalo porque la Brigada empezó a quitar árboles destrozados del lugar siniestrado, pero sus enormes raíces ahí siguen, levantadas como pendones derrotados en una guerra que nunca fue.
¡Joder, amigos lectores, es que tuvieron tiempo para hacer del tronco de uno de los árboles derrotados un banco! Seguro que aún estará riéndose de la idea este gracioso brigadista, con vocación seguro que de carpintero.
Como ya se comentó en otra ocasión, la zona está de lo más dejada… La hierba está pidiendo que alguien o algo le prenda fuego. Tiene la expresión de ser un campo de cebada recién segada. Y, si a eso le añades que está todo lleno de pequeñas ramas por todos los lados, además de basura…-incluidas algunas papeleras sin vaciar-, podría decirse que ello constituye un claro ejemplo de la dejadez que está sufriendo este páramo, que en su día debió de ser la envidia de los alrededores.
Y, por supuesto, como en este tiempo el trabajo en el pueblo escasea, va el ayuntamiento y obliga a la Brigada municipal a montar los maderos ¡¡¡faltando un mes para las fiestas!!!, lo que, si no, entorpece la circulación, sí provoca situaciones peligrosas, donde la pericia psicomotriz de los transeúntes mayores se ve en riesgo de sufrir algún percance en la tibia y el peroné o en ambas a la vez.
Pero, a ver, estimado contertulio, ¿quién pondrá en cuestión la logística festera del Ayuntamiento V si han convertido a Villafranca en una unidad de destino en la fiesta y nada más que para la fiesta? Parece que seguimos olvidando que tanto el pan como el vino lo seguimos pagándolo de nuestros bolsillos. No nos engañemos. El Ayuntamiento no da nada gratis. Todo procede del erario, que es dinero de todos. Otra cosa es que la sociedad quiera y desee que ese presupuesto se invierta en fiestas, olvidando otras necesidades más inaplazables.
Tertuliano Perplejo